Rain Day 3 - Sombras de Guerra

• Mei Ling Yuan: embajadora que representa al Imperio Chino (dinastía Qing). Mei es la hija del consejero del actual emperador de China, Chan Yuan. Ninguno de los demás países que acuden al Tratado conoce la causa exacta de por qué van hasta allí pero lo que es innegable es que, antes de la actual guerra sino-japonesa, la dinastía Qing había hecho de China una de las naciones más prometedoras para el siglo venidero. Así, sólo la delegación oriental encabezada por Yuan conoce los verdaderos motivos para emprender un viaje tan largo hasta las cordilleras europeas de Bollwerk der Krähen.

No es la primera vez que Chan envía a su hija para negociar por su país. Resulta sorprendente que un país tan tradicional como lo es China, escoja a una mujer para ser su representante aunque, una vez tenidos en cuenta sus logros y su valía, que ha demostrado con creces, no ha de sorprender a nadie. Mei Ling es una excelente lingüista y habla cuatro idiomas además de conocer en profundidad su lengua natal, de la que se dice que conoce hasta los caracteres hànzì más antiguos, prácticamente perdidos. Por si fuera poco, se cuenta que estudió durante unos años en una universidad de París.

La señorita Yuan estuvo prometida hace unos años pero, tras la tormentosa desaparición de su prometido, no ha vuelto a querer saber nada del amor. Una anécdota curiosa es que, cuando la madre de Mei Ling estaba embarazada de ella, todas las predicciones y augurios de los oráculos chinos apuntaban a que el bebé fuera varón pero, como es evidente, no fue así. Aun así, la hija de los Yuan ha superado con creces las expectativas de toda su familia y su padre se siente especialmente orgulloso de ella.

-Requisitos: vestuario chino de la época, elegante.

 

• Wu Hongzhang: hijo de Li Hongzhang y comandante del ejército chino. Wu, además de ostentar en el gobierno de la dinastía Qing un alto cargo militar, también es un venerable maestro del wushu o Kung-fu. Ha viajado por toda su tierra en busca y recopilación de saberes ancestrales sobre las artes marciales chinas para así crear su propio estilo marcial y filosofía, a los que ha dedicado gran parte de su vida. Durante sus numerosos viajes, más bien entendidos como una especie de peregrinaciones en busca del perfeccionamiento interior, no sólo aprendió sino que también enseñó a todo aquel que le rogara un poco de su tiempo o conocimiento. Se rumorea por los templos que gran parte de su periplos los ha realizado desde la más absoluta humildad, viviendo sólo de lo esencial e incluso teniendo que trabajar para poder pagarse su alimento (pese a no tener problemas monetarios debido a su puesto de comandante). Son varios los adversarios de orgulloso renombre que se ganó en un pasado por culpa de su mentalidad a la hora de evitar enfrentamientos innecesarios. Aunque wu es un hombre poderoso y de puños firmes, él mismo siempre ha tenido muy claro que su Kung-fu sólo hiere a aquel que de verdad lo merece y no a aquel que lo busca por necio.

Acude al Tratado como protector personal y profesor de Mei Ling. Chan, el padre de la embajadora, insistió mucho y personalmente en que la acompañase.

-Requisitos: vestuario chino de la época, elegante; armas ceremoniales chinas [consultar másters]; conocimientos en artes marciales chinas.